MUSCULÓMETRO, o cuando el cuerpo predice el tiempo
Parece cosa de abuelas, pero lo cierto es que todos, independientemente de la edad, hemos experimentado en alguna ocasión los desequilibrios atmosféricos. Aunque la ciencia todavía frunce el ceño cuando se le plantea qué de cierto hay en todo ello, sí hay ciertas evidencias: cuando baja la presión atmosférica, se eleva la presión articular, consecuencias, más dolor e inflamación; cuando hace frío nuestros músculos reaccionan contrayéndose como mecanismo de autodefensa, de qué si no íbamos a tiritar… El viento provoca irritabilidad y ansiedad y, por si fuera poco, al parecer la luna llena no solo afecta a nuestro comportamiento, también nos desvela…
Antiguamente lo que hoy se denomina ‘pseudociencia’ era una verdad incuestionable. Nuestros ancestros eran capaces de predecir los cambios haciendo algo que la evolución generacional ha dejado en desuso: escuchando sus propios cuerpos. Ahora se sabe que las articulaciones tienen unos baro-receptores o receptores de presión capaces de captar los cambios atmosféricos. Lo que parecía cosa de brujas resulta que va a tener cierto cariz científico. Al menos biológico. Y aunque también depende la sensibilidad de cada cual (hay quienes incluso lo apodan ‘meteorosensibilidad’), lo cierto es que ya hay investigaciones que confirman la correlación entre variaciones meteorológicas y dolor corporal.
Ahora se sabe que las articulaciones tienen unos baro-receptores o receptores de presión capaces de captar los cambios atmosféricos.
Pero si despertásemos nuestra memoria atávica y recuperáremos aquella sabia costumbre de nuestros antepasados, pondríamos en marcha algo que precisamente hoy está muy de moda: la medicina preventiva. ¿Cómo? Con lo que se podría denominar productos SOS, y esos no son otros que los aceites esenciales por su enorme potencial terapéutico. De-Stress Muscle Bath & Shower Oil de Aromatherapy Associates es lo que se podría denominar “physiotherapist in a jar”, o como algunos ya lo definen “el mejor producto para oficinistas”. Su base curativa está en la combinación de aceites esenciales que calientan la musculatura, tienen un efecto antiinflamatorio y calman las articulaciones: romero (estimula la circulación sanguínea, relaja los músculos, alivia calambres musculares y ataques reumáticos), jengibre (antiinflamatorio, dolores articulares y músculos doloridos, estimula la mente y el optimismo) y pimienta negra (tónico general, analgésico, antiinflamatorio e inmunoestimulante).
Desde la propia marca nos aconsejan seguir un ritual: masajear previamente todo el cuerpo antes de darse un baño o ducha tibia. Multiplicar los beneficios de la aromaterapia aplicando en la palma de las manos unas pocas gotas de la mezcla y llevarlas al rostro inhalando profundamente tres veces. Completar el ritual de relajación muscular aplicando el Aceite corporal de la gama De-Stress y prolongar los efectos calmantes con el De-Stress Muscle Gel si viaja. Para los lunáticos que no concilian el sueño cuando el satélite de la Tierra está en fase completa, unas pulverizaciones de Deep Relax Sleep Mist, con camomila, sándalo y vetiver, en el cuerpo y las sábanas antes de irse a dormir y sucumbirá entre los brazos de Morfeo.
A quienes todos estos cambios les alteren las emociones, nada mejor que Revive Morning Roller Ball, con aceites de neroli y cítricos, para aplicarse en cualquier momento y lugar. ¿Inclemencias del tiempo? Si te afectan, es porque quieres…