LA PLATA, el nuevo patrón oro en cosmética
Es uno de los principios activos con más pedigrí médico, utilizado antaño (incluso por griegos y romanos) como agente antimicrobiano sin igual (según Hipócrates, el padre de la medicina, apoya todos los procesos de curación), y principal ingrediente en los botiquines antes de la introducción de los antibióticos en la década de los 40. Pero, sobre todo, su valía se manifiesta a nivel epidérmico por sus propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y anti-fúngicas, “Ninguna bacteria, virus, hongo, levadura o microbio puede vivir en un líquido en el que haya una sola partícula de plata, ya que este metal puede aniquilarlas en muy pocos minutos. Además, procura una rápida regeneración de los tejidos dañados y acelera el proceso de cicatrización, mejorando notablemente problemas de acné, llagas o eczemas”, comenta Estefanía Nieto, Asesora Técnica de Pure Skincare.
“Ninguna bacteria, virus, hongo, levadura o microbio puede vivir en un líquido en el que haya una sola partícula de plata, ya que este metal puede aniquilarlas en muy pocos minutos”
No es de extrañar que buena parte del portfolio de cosméticos que incluyen plata en su formulación, añadan a su denominación calificativos como Saviour, Rescue o Repair… Este también fue uno de los motivos por los cuales Margaret de Heinrich, co-fundadora de la marca de lujo Omorovicza, decidió incluir una línea muy especial en el catálogo general de la marca: Silver, ¿el motivo? Padeció acné en su juventud, y después de probar y probar productos, lejos de mejorar su situación, la agravaron dañando y sensibilizando en extremo su piel. La cura llegó cuando se mudó a Budapest con su esposo (si quieres saber cómo esta entrañable pareja se conoció, puedes leer aquí) y adoptó los hábitos terapéuticos de los baños termales. Pronto comenzó a notar mejoría, su acné se redujo y regresó la luminosidad de una piel sana.
Como homenaje a las propiedades tan curativas de estas aguas, surgió Silver Skin Saviour, un tratamiento cuyo activo estrella es la plata coloidal, una fórmula en la que las partículas preciosas están suspendidas en una solución líquida, lo que les permite dispersarse de forma uniforme abarcando mayor superficie de piel, ampliando así su asimilación y acción terapéutica. Todo comenzó con la mascarilla, y pronto se convirtió en uno de los productos estrella de la marca por su acción intensiva. Es uno de esos productos que te demuestra que está haciendo algo cuando el cosquilleo empieza a surgir y la activación circulatoria se demuestra con un ligero enrojecimiento de la piel. Los resultados visibles, ponen el epílogo a la historia.
Es uno de esos productos que te demuestra que está haciendo algo cuando el cosquilleo empieza a surgir
Tal fue el éxito, que ahora la marca ha decidido ampliar la familia Silver con dos nuevos productos: Silver Skin Saviour Lotion y Silver Skin Saviour Tonic, dos productos pensados para ser aplicados después de la limpieza para sanear y reparar la piel, especialmente las más problemáticas. La plata coloidal, hace milagros, pero el resto de activos que actúan en sinergia, no se quedan atrás: Niacinamida (vitamina B3), con propiedades antiinflamatorias y sebo-reguladoras, ayuda a reducir el enrojecimiento, el tamaño de las lesiones y las manchas post-inflamatorias, además, actúa sobre la melanogénesis evitando la acumulación desigual de pigmento; Zinc, presente en la loción, es un micronutriente esencial para muchas reacciones enzimáticas del organismo, regula el metabolismo de lípidos (alimento de la bacteria responsable del acné), proteínas y ácidos nucleicos.
La razón por la que es tan esencial el zinc, es porque la piel contiene tan solo el 6% del contenido total de zinc del organismo, y el movimiento del zinc es limitado, no tiene un depósito de almacenamiento, por tanto el suministro externo es esencial para el buen estado de la piel. También se ha descubierto que el zinc inhibe la actividad de la 5-Alfa-Reductasa, responsable de la sobre estimulación de las glándulas sebáceas, por ello suprime la producción de sebo en la piel, combate el crecimiento excesivo de P. Acnes, la bacteria responsable del acné, y minimiza la formación de manchas.
Otros ingredientes importantes: Ácido Glicólico, un alfa-hidroxiácido conocido por su acción intensiva, rompe los desmosomas (estructuras celulares que mantienen adheridas a células vecinas) acelerando la renovación celular, con ello logra minimizar la profundidad de arrugas y finas líneas, cicatrices de acné, además de activar la síntesis de neo-colágeno y elastina; y Ácido Salicílico, un beta-hidroxiácido que elimina células muertas de la superficie de la piel, es lipófilo, al sentirse atraído por los lípidos es capaz de limpiar y regular la glándula sebácea evitando que se tapone y se instale la bacteria causante del acné. Y, por si fuera poco, está presente el mítico Healing ConcentrateTM patentado de la firma (el hilo conductor de toda la cosmética Omorovicza), capaz de conseguir, por biofermentación, transformar la estructura molecular de los minerales haciéndolos biodisponibles (es decir, asimilables), permitiendo que la piel pueda beneficiarse de ellos y de su acción curativa, cicatrizante y regenerante.