5 recetas para hacer del acto del baño una verdadera liturgia de bienestar
Cuando el mundo se convierte en un caos, tendemos a la introspección, dicen los expertos. Buscamos vías de escape que nos arrullen el alma, que nos mimen y nos arropen a nivel físico, mental y espiritual. Baño, ¿el Dorado del bienestar? La ciencia corrobora su acción terapéutica para tratar cuadros de estrés, insomnio o depresión. Y no es para menos: el calor del agua dilata los poros haciendo que penetren con más facilidad los activos terapéuticos que se hayan echado al agua (flores, hierbas medicinales, aceites esenciales, sales…), así como los vasos sanguíneos (fluidifica la sangre), también favorece la transpiración, por tanto tiene un efecto detox natural e instantáneo, relaja músculos y articulaciones e induce al sueño.
Una experta en baños ancestrales, Doña Rosita Arvigo (sanadora tradicional maya) en su libro “Spiritual Bathing: Healing Rituals and Traditions from Around the World”, nos muestra en su completo ejemplar cómo se ha aprovechado el poder sanador del agua en todas las culturas, desde los rituales de inmersión del Torah, los ritos de luna nueva sumerios, los baños sagrados mayas, aztecas e incas o la purificación musulmana y japonesa. A lo largo de la historia, el agua ha estado ligada a la sanación y a la divinidad, como una forma de purificación para estar a la altura de los dioses, para restaurar y rejuvenecer cuerpo y alma.
Paulette Kouffman Sherman, en su libro “The Book of Sacred Baths. 52 Bathing Rituals to revitalize your spirit”, propone baños cargados de intenciones, aderezados con velas, inciensos, sales (las de magnesio y del Himalaya son esenciales), cuarzos y minerales transformadores gracias a su benevolente energía. Y es que, en el fondo, un baño es como un buen potaje, admite muchos ingredientes, incluso los más variopintos, pero siempre tendremos la seguridad de que saldrá bien…
Igual que estas completas recetas, sencillas, pero precisas, con las que no solo ganaremos puntos en el ranking del bienestar, sino que nos dejarán la piel como para competir en los Olímpicos…
Talasoterapia en casa
Desde que Madonna dijo que se aplicaba en el trasero la lujosa mascarilla facial de arcilla de su propia marca cosmética, algo sacudió los cimientos de la belleza. Se trataba de una arcilla volcánica de la ciudad balneario Montecatini Terme, en la Toscana (Italia), agraciada con un recubrimiento magnético que atraía las toxinas, regeneraba y reparaba la piel de forma mágica. Su lógica era aplastante: “si es fantástica para la piel de mi rostro, ¿por qué no lo iba a ser para la de mi pompis?”.
Esa es la magia de las arcillas y barros cargados de minerales curativos, como los de la llamada ciudad Spa, Budapest, de donde proceden las recetas de salud y belleza de la firma Omorovicza. Talasoterapia de lujo con su gama Moor Mud, repleta de sustancias curativas como calcio, magnesio, ácidos húmico y fúlvico (un elemento especialmente importante para la síntesis del ADN y el ARN, protegen a las células de la oxidación), que podemos disfrutar en casa disfrutando de sus beneficios como si estuviéramos en un balneario.
Primer paso: limpieza mineral profunda con Thermal Cleansing Balm, el bálsamo purificante e hidratante de la marca que ha terminado siendo un best seller. Además del lodo curativo húngaro, contiene aceite de almendras, rico en vitamina E, para asegurarnos de que la piel nos queda protegida, lustrosa y suave. Aquí la consigna es hacer como Madonna, extenderlo más allá de los confines faciales, aprovechemos su poder purificante para poner a punto cuello, escote, brazos e incluso abdomen y aledaños. Retirarlo de forma suave con su Cleansing Mitt, exclusivo de la marca, para después continuar con Refining Facial Polisher, un pulido en toda regla gracias no solo al poder transformador de los lodos de los páramos húngaros, sino a las microalgas marinas que incorpora la fórmula y la piedra pómez, para liberar asperezas, refinar la textura y potenciar la luminosidad.
Para finalizar, una capa de Ultramoor Mud Mask, repleta de lodos húngaros, arcilla Hectorita (absorbe impurezas) y exopolisacáridos marinos, derivados del plancton, que tensan las fibras de colágeno proporcionando un efecto lifting inmediato, y dejar que sus minerales curativos penetren mejor gracias al vapor del agua caliente del baño. Con Omorovicza todo son ventajas, aparte de la calidad de su carga mineral, su sistema patentado Healing Concentrate™ logra una mejor asimilación dejando la piel lustrosa y rejuvenecida. Un plus: añade al agua un puñado de sales naturales (Epsom, Mar Muerto o del Himalaya, sus virtudes son únicas), el confort será completo.
Purificar energías
Una pizca de bicarbonato, unas cucharadas de sal y unas cuantas gotas de aceites esenciales. Parece la receta de una bruja pero no. O sí. La cuestión es que antaño, un baño bien adobado era sinónimo de curación. A todos los niveles. Porque el bicarbonato no solo suaviza la piel, sino que, según los expertos en terapia energética, equilibra el campo áurico y sella posibles fisuras. La sal nos provee de los minerales esenciales además alcaliniza, nos ayuda a deshacernos de los metales pesados y las toxinas de las células de la piel y, ¡qué diantres! Nos resetea como si fuéramos la última versión de Macintosh.
Y si al agua del baño con esa pizca de sal y un poquito de bicarbonato echamos unas gotas de bayas de enebro (fortificante, purifica de la mente y las emociones), romero (profundamente estimulante, aumenta la atención, el estado de alerta, la energía y el estado de ánimo) o cítricos (elevan la energía al instante y sin necesidad de cafeína…). Eso es posible gracias a las mezclas maestras de Aromatherapy Associates, como Revive Morning Bath & Shower Oil, cargado de enebro, pomelo y neroli (el aceite anti-depresión por excelencia), que nos sacan del letargo al instante.
Importante: hacer el ritual que propone la marca, antes de sumergirse en el agua de baño, comenzar con una vigorizante sesión de cepillado corporal con Polishing Body Brush, en gestos ascendentes siguiendo el flujo sanguíneo hacia el corazón, con ello re-energizaremos todo el cuerpo y le ayudaremos a eliminar toxinas, continuar con unas gotas de la mezcla de aceites, masajear, especialmente por las zonas de pulso, echar en las palmas de las manos e inhalar profundamente tres veces, cerrar los ojos y establecer intenciones, ¿qué le pedimos a este baño revivificante y transformador? Que vuele la imaginación…
Infusión forestal
Ya tiene respaldo científico: estar en contacto con la naturaleza nos devuelve la salud y el bienestar, y si no podemos estar cerca de ella, la llevamos a casa. Empecemos por amoldar el ambiente con velas aromáticas, ¿qué tal Figue Cypres de Ladenac? Con su fondo amaderado profundo y sofisticado y sus notas mediterráneas de higuera y ciprés. Conectemos Spotify, los cantos de pájaros o sonidos de la naturaleza serán perfectos, cerrar los ojos por un instante y simplemente sentir intentando dejar la mente vacía.
Abrir el grifo y escuchar el agua correr, como si tuviéramos una cascada cerca que nos purifica con sus prístinas aguas. Destapar una botellita de Forest Therapy Bath & Shower Oil de Aromatherapy Associates, inhalar profundamente tres veces, sus esencias de enebro, ciprés, eucalipto, pino, cedro, musgo de roble… Nos harán tocar con los dedos los bosques más ancestrales. Echar unas cuantas gotas al agua de baño y dejarse llevar hasta que el cuerpo diga.
Embaucar a Morfeo
Agua caliente y aceites esenciales. El mejor sortilegio para despertar a Morfeo, valga la paradoja. Y mucho más sin son aceites de manzanilla, vetiver y sándalo… Solo mencionarlos hace bostezar. Porque el vetiver nos arraiga y arrulla, nos hace sentirnos parte del todo, y eso ya relaja, y mucho… La manzanilla calma, en todos los sentidos, y el sándalo, promueve un sueño reparador y profundo y nos lleva a un estado mental meditativo, de soltar lastre y dejarnos llevar hacia donde la magia de los aromas quieran llevarnos.
La familia Deep Relax de Aromatherapy Associates, es la fórmula para dormir más vendida y galardonada con múltiples premios, elaborada a mano con un complejo de aceites esenciales único y terapéutico. Perfecto para apagar mentes hiperactivas y cuerpos inquietos. Si además el ambiente se caldea con los efluvios de Relax Room Candle, con su esencia de mirra y notas amaderadas, la serenidad será completa.
Despertar a la Diosa interna
El poder está dentro de ti. Una máxima manida de la filosofía oriental y todas las que aboguen por el poder personal. El despertar de la Shakti, que dicen los expertos, pasa por honrar a nuestro cuerpo, embellecerlo y despertar su energía femenina. ¿Cómo? Comenzando con una rica exfoliación a base de caña de azúcar de comercio justo, aceite de semilla de albaricoque y puro oro coloidal de Gold Sugar Scrub de Omorovicza; y agregando al agua de baño aceites de sándalo, despierta la conciencia, la autoconfianza y la sensualidad; geranio, armoniza y equilibra a nivel hormonal; rosa, la flor de Afrodita, diosa del amor y la belleza, despierta la felicidad interior; y pachuli, eleva la libido.
Todos ellos presentes en Inner Strength Bath & Shower Oil de Aromatherapy Associates, unas gotas al agua de baño nos brindará un ritual de construcción de positividad y empoderamiento. Inhalar profundamente antes de introducirse en el agua de baño y masajear unas pocas gotas por nuca, muñecas, clavículas y bajo vientre para sentir sus efectos más intensamente. ¿Eres amante de las piedras naturales? Agrega alguna pieza de cuarzo rosa para beneficiarte de la vibración del amor. Para concluir, una rica capa de Renewing Rose Body Oil masajeando por todo el cuerpo, enriquecido con aceites de onagra, rosa y geranio (equilibran a nivel hormonal), será el colofón a un ritual de auto-amor perfecto.