Cuando el calor aprieta: la receta de la reina de Hungría es lo que más refresca

  • La firma húngara Omorovicza acaba de lanzar una edición limitada de diseño exclusivo y tamaño travel de su best seller Queen of Hungary Mist, la bruma facial más premiada.

Un sinfín de leyendas giran en torno a la que, según dicen, es una de las recetas de belleza más antiguas de la historia europea. Su relato se pierde entre las brumas del tiempo, y su origen, se atribuye a ermitaños sombríos, monjes o alquimistas milagrosos. Se cree que data del siglo XIV y ha sobrevivido a los lances de la historia durante siglos. Hasta tal punto, que podemos encontrar vestigios de numerosas versiones de la fórmula original, la misma a la que se le atribuían propiedades casi mágicas, aunque la más aplomada es la que sirvió para dar forma al elixir de belleza de la reina Isabel de Hungría para mantenerse joven por muchos años.

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Hasta llegó a adquirir el estatus de “primer perfume”, Hungary Water, se denominó, un remedio que se usó sobre un pañuelo para refrescarse o incluso verterlo en el agua de baño para embeber sus propiedades terapéuticas hasta que en el siglo XVIII se pasó a blends más complejos. También cuentan que esta cura medicinal tenia una función de rejuvenecimiento, la reina la usaba para lavarse la cara y las manos e, incluso, la bebía. No queda del todo claro cuáles fueron los primeros ingredientes botánicos que la compusieron, pero sí estaba presente el romero, la salvia, la rosa o la flor de naranjo.

Sea como fuere, la fábula nos dejó como legado el Agua de la Reina de Hungría que todavía hoy sigue siendo un must de belleza gracias a algunas marcas como Omorovicza, que supo rescatarla del pasado con honores con su Queen of Hungary Mist, manteniendo sus ingredientes esenciales (hidrolatos de flor de naranjo, rosa damascena y salvia), pero enriqueciéndola con otro tesoro proveniente de aquellas aguas termales: Healing ConcentrateTM un concentrado curativo patentado que transforma la estructura molecular del agua rica en minerales para que la piel los absorba y asimile de una forma más efectiva.

Queen of Hungary Mist Omorovicza

Estas aguas proceden del Lago Hévíz (Hungría), una zona del Planeta única ya que la corteza terrestre es más delgada, por lo tanto, el agua que brota a la superficie es más rica en minerales y otros elementos como los ácidos húmico y fúlvico, esenciales para la vida. El beneficio de Healing ConcentrateTM no es solo que está aportando los nutrientes vitales que la piel necesita para estar sana y bonita, sino que también ayuda a impulsar la producción de colágeno y elastina, retener la humedad y fortalecer la barrera natural de protección de la piel.

La bruma hidratante facial Queen of Hungary Mist, no se trata solo de uno de los best seller de la marca húngara, sino que ha sido premiado en numerosas ocasiones como producto esencial. Es versátil: perfecto como último paso de la limpieza para tonificar la piel con un sencillo gesto, aporta un plus de energía en cualquier momento del día y refresca y repone nutrientes si lo aplicamos, por ejemplo, tras la exposición solar. La pectina de manzana nos regala un extra de flexibilidad e hidratación, la Acerola la dosis necesaria de vitamina C antioxidante, el fermento Saccharomyces derivado de las aguas termales húngaras la protección necesaria contra elementos nocivos externos, y el extracto de Chlorella, la detoxificación que nuestra piel necesita para mantenerse libre de impurezas.

Tales credenciales han hecho de este producto un esencial del neceser de belleza, y la buena noticia es que la marca acaba de lanzar para esta temporada de verano una decorativa versión Limited Edition 2020 Pink & Orange Blossom travel size (de 50 ml en vez de los 100 ml estándar a 39 € en lugar de los 65 €, en exclusiva en Pure Niche Lab), Queen of Hungary Mist más nómada y resplandeciente que nunca, para que tengamos más motivos para mantenerla en nuestro neceser regalándonos momentos de belleza y bienestar allá donde estemos.